octubre 16, 2006

nota editada en Pelota de Trapo

Comunicado de los trabajadores del INDEC-
10/08/06

(APE).- “Recibimos orgullosamente esta marcha del Movimiento Nacional de los Chicos del Pueblo de la Central de Trabajadores Argentinos en la puerta del INDEC. No es casual que este sea el primer lugar en el que mostramos la realidad de nuestros pibes, una realidad que va más allá de los índices que los trabajadores producimos en nuestro Organismo. Porque es cierto que esa producción se realiza con la honestidad propia de los trabajadores, pero no es menos cierto que un número índice no es una realidad, sino el resultado de la aplicación de una metodología que pretende medir esa realidad. Los trabajadores del INDEC, los trabajadores de ATE y de la CTA sabemos que el hambre no es un número sino un crimen, tenemos claro que un país que produce alimentos para cientos de millones no puede permitirse albergar en su territorio a un solo niño con hambre. Entonces, que hoy los pibes del pueblo estén aquí tiene un especial significado, nos están mostrando claramente que existe una realidad social cuyos índices no mejoran ni mejorarán en tanto no se atienda el reclamo de redistribuir la riqueza. Los índices nos muestran que ha bajado la desocupación, nos hablan de crecimiento sostenido y de otros avances en materia económica, los chicos del pueblo nos demuestran que con eso no basta, no basta para mejorar una situación social que, a esta altura de las cosas todos sabemos, no es producto de un error ni de una casualidad sino que es el resultado de la aplicación de un plan genocida que utilizó el terror como herramienta y logró instalar el hambre como continuidad de su labor destructiva.

Pero nada es eterno, menos aún cuando existe la firme voluntad y el renovado compromiso del pueblo para con el pueblo, para con nuestros pibes. Hoy el desafío de los sectores populares es el de mantener viva en la retina de todos la imagen de la realidad que no muestran los índices, y la de la lucha diaria por modificar esa realidad. La CTA, Los Pibes del Pueblo y todas las organizaciones populares que en ella confluyen son las herramientas colectivas que debemos fortalecer para enfrentar en cada rincón de nuestro país y de Latinoamérica, esa patria grande con la que soñamos, este plan genocida que solo puede ser desterrado desde la conciencia de la fuerza que tiene lo colectivo. Esa conciencia que debe unirnos a todos tras un solo objetivo, el de terminar con el crimen del hambre está, aunque parezca paradójico, alimentada, con las marchas de los pibes, con la memoria de los compañeros desaparecidos, de tantos luchadores sociales que ofrecieron su vida por la causa de los desposeídos y con la firmeza con que hoy asumimos ante los pibes en el compromiso de ganarle a la injusticia, en un momento histórico que es duro pero que nos insta a volver a soñar con una patria latinoamericana, fuerte, libre, soberana y justa para nuestros pibes y los pibes de nuestros pibes."


JUNTA INTERNA ATE - INDEC

Upgrade Your Email - Click here!

octubre 11, 2006

El hambre es un crimen
Los Chicos del Pueblo y la CTA marcharon en la ciudad
En el marco de la Campaña Nacional "El Hambre es un Crimen", niños, educadores y trabajadores nucleados en la CTA, junto con el mítico trencito que encabezó las largas marchas de los niños del Movimiento Nacional de los Chicos del Pueblo, realizaron una caravana por el centro porteño.
La primer parada de la marcha fue en el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) donde los Chicos del Pueblo fueron recibidos con los papeles que denunciaban la real pobreza que existe en nuestro país. “Esta problemática nos involucra a todos los estatales, a todos los compañeros que queremos un Estado para el pueblo. Porque somos partícipes de esta lucha por nuestros pibes, para terminar con el hambre y el crimen en la Argentina”, dijo Daniel Fazio, integrante del cuerpo de Delegados de ATE- INDEC. Y agregó: “Esta realidad, honestamente, no está reflejada por las cifras que producimos en el Indec. Pero sí está la voluntad de nuestros compañeros de la CTA, que luchan para terminar con la injusticia social en nuestra Argentina”. Más tarde, la columna se dirigió a la Jefatura de Ministros de la Nación, donde todos los chicos cantaron en la puerta del organismo a los funcionarios que “el hambre es un crimen y que a ningún pibe le puede faltar el pan”. También Omar Giuliani, coordinador del Movimiento de los Chicos del Pueblo, explicó que “estamos acá para que, junto con los trabajadores, podamos instalar el verdadero problema en la Argentina que es el hambre y sobretodo el de los más pequeños, porque en nuestro país el 70% de la población menor de 18 años está por debajo de la línea de pobreza”. “Hoy veíamos como los distintos sectores de ATE decían que a pesar de que están ocupados, también existe la precariedad laboral y eso genera hambre y exclusión y por eso estamos hoy juntos en la calle con los trabajadores”, culminó Giuliani. Al final de la jornada de movilización, se realizó una concentración frente al Ministerio de Desarrollo de la Nación, que inesperadamente mantuvo sus puertas cerradas, mientras que en el interior del edificio se desarrollaba una asamblea: además, la policía intentó impedir a empujones la entrada a los manifestantes, quienes finalmente entraron por uno de los laterales del edificio con los redoblantes en apoyo a las reivindicaciones de los trabajadores de ese organismo. Allí, el secretario de Organización de la ATE porteña, Mariano Sánchez Toranzo, manifestó que, “siempre que hay un pibe en la calle es porque hay un padre desocupado, precarizado o por debajo de la línea de la pobreza. Y hoy los trabajadores venimos a denunciar esta demanda que es de todos y que tiene que ver con una distribución más justa de la riqueza en la Argentina”. Y concluyó: “Por eso luchamos y por eso seguiremos luchando”.
Informe: ATE Capital Federal

octubre 02, 2006

informATE- resolucion 48


Desde la instalación de las políticas de carácter neoliberal en la década del 90, cuyas consecuencias nefastas siguen vigentes aún hoy, nuestro Gremio y nuestra Central jugaron un papel protagónico en la denuncia y la resistencia a esas políticas. Mantener esa actitud no fue fácil, tener los locales abiertos para atender a los compañeros que eran dejados cesantes cuando se implementó la reforma del Estado, acordada por el menemismo con sus socios gremiales, nos valió el ser separados de todos los ámbitos de discusión del Estado, la prohibición a nuestros delegados para ejercer como tales en varios organismos y la persecución a nuestros afiliados en casi todo el Estado. Sin embargo, también ganamos lo que en el tiempo es para nosotros lo más importante, la adhesión y la confianza de nuestros compañeros que saben que ATE no traiciona. Por eso en esta instancia, en que podría concretarse el esfuerzo y la lucha de los trabajadores del INDEC por lograr una mejor situación en cuanto al vínculo laboral que los une al Estado, esto es dejar de estar contratados en negro, queremos llegar a todos los compañeros para informar, clara y precisamente, sobre los detalles de los trámites realizados por las autoridades del Instituto al respecto y de la intervención que le cabe a la ATE en particular en dichos trámites. Como todos sabemos, los trabajadores del Estado venimos llevando adelante una larga lucha contra el empleo en negro, en el año 2005 los compañeros del INDEC en particular sostuvimos un conflicto que tenía como reivindicación, entre otras, el pase a planta de los contratados cuya situación de precariedad laboral era insostenible y daba lugar a diversas arbitrariedades que era necesario enfrentar. Ese conflicto obligó a las autoridades a dar marcha atrás en la decisión de descentralizar algunos programas del Instituto, y a abrir un ámbito de trabajo para llevar adelante el pase a planta de los contratados que realizan tareas de carácter permanente. En tal sentido se están dando los primeros pasos, los compañeros de la EPH y del IPC contratados por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, programas que eran los efectivamente amenazados con la llamada "descentralización", así como los compañeros que se encuentran contratados por el Convenio general de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, pasarían a desempeñarse bajo los términos de la Resolución 48/2002, la que brinda relación de dependencia con el organismo y los beneficios propios de esa relación laboral. Ello en la primera etapa, que se implementaría antes de fin del año en curso. En tanto, los compañeros contratados bajos los términos de otros convenios pasarían a esa planta en los primeros meses del año 2007. En esos términos ATE - INDEC se integró a la mesa de trabajo que estableció los criterios de pase a la nueva situación de revista, dejando aclarado los límites de su responsabilidad en tales tramitaciones y su posible consecución. Dichos criterios, los trabajos llevados a cabo y los términos en los que los mismos se desarrollaron se encuentran detallados en las Actas cuya copia les enviaremos oportunamente para información de todos los compañeros.
Para nosotros, es preciso destacar que si realmente se logra concretar este pase a Resolución 48 de los compañeros que sufren desde hace años la injusticia de la precariedad laboral, es el resultado de la lucha y el aguante de los compañeros. Nadie puede adjudicarse triunfo alguno, menos aquellos que fueron factor determinante y partícipes directos de la implementación de esas políticas en todo el país.
Por eso compañero contratado está claro que no es necesario, para pasar a la 48, el afiliarse a ningún gremio, la afiliación depende de tu elección basada en la evaluación que hagas del accionar histórico de cada sindicato y de cada central de trabajadores, su firmeza ideológica y fundamentalmente como te identificás con cada uno de esos factores.

JUNTA INTERNA ATE - INDEC -CTA-

EL HAMBRE ES UN CRIMEN
El 70% de la población total del país menor de 18 años, o sea nueve millones y medio de niños, se encuentran viviendo en la pobreza, la mitad ya casi no come. Decenas de niños se mueren por día -menores de 5 años- por causa de pobreza. Cuando hablamos de mortandad infantil no solamente deberíamos incluir a los pequeños que se lleva la muerte sino también a los niños dañados -para siempre- física, intelectual y emocionalmente antes del nacimiento de las palabras.
El hambre es un crimen que aniquila el prodigio de la vida. Debe ser detenido. Si o si. Porque en nuestro país no faltan riquezas, ni alimentos, ni platos, ni madres, ni médicos, ni maestros, faltan en cambio la voluntad política, la imaginación institucional, la comprensión cultural y las ganas de construir una sociedad de semejantes donde broten los panes en la mesa en una mirada de manteles, para vestirse de guardapolvo blanco, para decir trabajo, para cantar infancia, para besar familia.
Sin una infancia sana, amasada y entera es impensable una Argentina mejor. Porque un país que mutila a sus niños es un país que se condena a sí mismo.
Imaginar el amor donde fue perdido, darle cuerda a nuestra dignidad, decirle NO a los accionistas de los niños descalzos. Montar en ganas: un vuelo rasante de palomas, un disparo de globos, el ratón de las monedas. No hay verdad más armada que la pura inocencia. Sí, otro país es posible.